En sus 70 años de vida la sombra del hombre murciélago ha sobrevolado la cartelera y la pantalla chica hasta convertirse en "una fantasía de poder adolescente". Así define Diego Olmos, dibujante de la reciente aventura de Batman, a este héroe, un personaje que ha sabido crear su propia identidad para desmarcarse de su contrincante Superman.
El éxito de Superman llevó a la editorial DC Cómics a apostar por un nuevo personaje inspirado en varios referentes, "desde los personajes de novelas baratas de aventuras hasta el Zorro", que culminó en un hombre murciélago "oscuro, misterioso y un poco terrible".
Así, Batman se convirtió en todo lo opuesto a Spiderman, en un personaje sin superpoderes, que emprende una cruzada contra el mal gracias a su poder económico pero "fuera de la ley, usando la violencia y cualquier tipo de recurso para conseguir sus fines", de ahí que el hombre murciélago haya sido acusado de fascista.
Pero eso no ha impedido que el héroe de ciudad Gótica haya protagonizado aventuras en todos los formatos y que, junto a otros personajes del mundo del cómic, se haya convertido en un icono popular.
El cineasta Christopher Nolan convirtió a este héroe de ficción en el protagonista de la película más taquillera del año 2008 en Estados Unidos con "El caballero oscuro", algo que ha llevado al propio Olmos a pensar que "quizás el Batman del siglo XXI no esté en el cómic sino en el cine".
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