Se acaban las carreritas, el estéreo a alto volumen y menores al volante.
Los viajes con enfrenones, carreritas para “perrear” al pasaje, el reggaetón a todo lo que da, las estampas de San Judas o de la Santa Muerte, los peluches en los espejos y los asientos deshechos de los microbuses que circulan por la avenida Paseo de la Reforma se encuentran sentenciados.
A partir de mañana dejarán de circular 282 microbuses y 85 autobuses viejos —algunos con más de 20 años de servicio, es decir, el doble de su vida útil—, por una de las avenidas más importantes del Distrito Federal.
Su destino será el depósito de chatarra, tal vez la venta de fierro por kilo, o en el último de los casos y dependiendo su año de fabricación, su reacomodo en otras rutas de la ciudad.
Atrás quedarán los viajes tormentosos, según el testimonio de algunos pasajeros, en los que debían ir agarrados de pies y manos para no caer a causa de los frenados estrepitosos de los choferes. “Está bien que los cambien porque manejan rápido, los micros están deteriorados y sucios”, dijo Imelda Miranda.
También dejarán de verse los conductores menores de edad usando camisetas sin mangas que muestran sus tatuajes, así como sus aretes y sus cabelleras engeladas o teñidas. Incluso, podrían acabar sus malos tratos y gestos cuando el pasajero les grita “bajaaaaann” y que éstos no escuchan por el alto volumen que llevan en su estéreo.
A partir de mañana dejarán de circular 282 microbuses y 85 autobuses viejos —algunos con más de 20 años de servicio, es decir, el doble de su vida útil—, por una de las avenidas más importantes del Distrito Federal.
Su destino será el depósito de chatarra, tal vez la venta de fierro por kilo, o en el último de los casos y dependiendo su año de fabricación, su reacomodo en otras rutas de la ciudad.
Atrás quedarán los viajes tormentosos, según el testimonio de algunos pasajeros, en los que debían ir agarrados de pies y manos para no caer a causa de los frenados estrepitosos de los choferes. “Está bien que los cambien porque manejan rápido, los micros están deteriorados y sucios”, dijo Imelda Miranda.
También dejarán de verse los conductores menores de edad usando camisetas sin mangas que muestran sus tatuajes, así como sus aretes y sus cabelleras engeladas o teñidas. Incluso, podrían acabar sus malos tratos y gestos cuando el pasajero les grita “bajaaaaann” y que éstos no escuchan por el alto volumen que llevan en su estéreo.
Mejor, pero más caro
Mañana a las 10 de la mañana, a la altura del Auditorio Nacional, el jefe del Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, dará el banderazo de salida al nuevo Corredor Reforma.
Se trata del primer proyecto vial que su administración logra sacar a flote con los concesionarios del transporte público, en este caso, con los de la Ruta 2.
Serán 44 nuevos autobuses, —en una primera etapa— propiedad de dos empresas que se conformaron con los concesionarios: Corredor Villa Lomas (Covilsa) y Reforma Bicentenario. Habrá dos tipos de servicio, el “plus” y el ejecutivo. Las unidades son más grandes y menos contaminantes, con un servicio de mejor calidad, aunque más caro.
Servicios plus y expreso
Armando Quintero, secretario de Transportes y Vialidad, confirmó que el costo será de 4.50 pesos para el servicio “plus” que tendrá más paradas, y de 5 pesos para el expreso, mismo que tiene menos paradas, pero será más rápido.
Actualmente los microbuses tienen una tarifa mínima de tres pesos y aumenta a cuatro y 4.50 pesos, dependiendo la distancia que se recorra.
La tarifa que entrará en vigor el domingo será el segundo aumento en menos de dos años que el gobierno de la ciudad autoriza a esta ruta.
En marzo de 2008, cuando el gobierno local firmó el convenio de mejoramiento con la ruta 2, se autorizó el aumento de 50 centavos, con la condición de que se renovara el parque vehicular y se mejora la calidad del servicio de transporte público.
No obstante, algunos de los futuros operadores comentaron su desacuerdo pues dijeron que el nuevo servicio debería costar entre cinco y ocho pesos por viaje.
Con este nuevo sistema, los 220 mil pasajeros que viajan por este transporte a diario —entre oficinistas de los grandes corporativos financieros, empleados de hoteles internacionales y de instituciones federales— el domingo podrán estrenar asientos forrados, aire acondicionado y pantallas donde podrán ver videos, películas y publicidad del GDF.
El nuevo corredor abarcará 22 kilómetros, desde la zona comercial de Santa Fe hasta los alrededores de la Basílica de y el paradero de los Indios Verdes.
Quintero Martínez también adelantó que el siguiente corredor que será inaugurado será el que corra por Periférico y que, según sus cálculos, estará listo a mediados de noviembre o principios de diciembre de este año.
El funcionario añadió que el sistema de prepago con tarjeta electrónica, similar al que se usa el Metro y el Metrobús, podría ponerse en marcha en 2010.
Agregó que la Secretaría de Finanzas capitalina debe lanzar la convocatoria para esta licitación que, adelantó, será de varios millones de pesos.
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