Tula es, si el Gobernador de Hidalgo consigue las 700 hectáreas requeridas por el Gobierno Federal, la sede de la nueva refinería de petróleo del país. Esta sede fue disputada por 10 entidades: Michoacán, Hidalgo, Campeche, Tabasco, Veracruz, Tamaulipas, Guanajuato, Puebla, Tlaxcala y Oaxaca. Los gobernadores de estos estados se “enfrentaron” en dos debates, en el primero “debatieron” cinco y en el segundo la otra mitad. La discusión fue ¿Qué entidad tiene la mejor oferta para que la refinería se construya en su espacio?.
Ganó Tula, de hecho desde antes, mucho antes de que este debate se diera a conocer, Tula había sido perfilado como la sede por el propio PEMEX en un estudio que se realizó para este fin; antes del 18 de marzo, fecha en que el Presidente Calderón daría a conocer el lugar; pero por “causas democráticas” se convocó al debate, en el que Guanajuato entró como última alternativa, y digo última alternativa porque el gobernador de dicho estado, Juan Manuel Oliva presentó su deseo de obtener la sede después de las alternativas que la paraestatal ya tenía presente.
A pesar de que Hidalgo ganó en el dicho acto democrático la sede, se encontró con un plazo de 100 días para lograr conseguir las 700 hectáreas requeridas por PEMEX, como condición, para que se instale la magna obra. Si para finales de julio Tula no consigue los terrenos, será el gobierno panista de Guanajuato quien obtenga el proyecto, Salamanca ya presume de las 700 hectáreas requeridas.
En menos de 30 días, el gobernador hidalguense ya tenía problemas para conseguir los terrenos, los ejidatarios no quieren vender sus propiedades al gobierno. Se ha especulado que personas pagadas por el gobierno de Guanajuato han alentado a los ejidatarios a no vender sus propiedades para la instalación de la nueva refinería de petróleo, o hacerlo a precios que no pueda solventar el gobierno hidalguense, de hasta mil pesos por metro cuadrado, precio que ninguna entidad desearía pagar a unos simples campesinos (preguntémosle a los ejidatarios de San Salvador Atenco).
Después de la epidemia de influenza, AH1N1 o influenza humana, que apareció unos días después del anuncio del ganador de la sede de la refinería de petróleo; el gobierno de Hidalgo sigue sin poder obtener los acuerdos necesarios con los poseedores de 10 ejidos que se encuentran alrededor de la refinería que ya existe y donde se planea construir la moderna instalación de PEMEX.
Al parecer, la reforma energética posible, según los legisladores, no ha traído beneficios desde su aprobación, ni siquiera para el Gobierno Federal, que la celebró tras su paso por el Congreso y que ahora, en boca de la Secretaria de Energía, Georgina Kessel, no traerá beneficios hasta, por lo menos, petróleo y la búsqueda de generación de energía y aún no se consigue ni el primer paso de una de las reformas estructurales que promovió el gobierno de Felipe Calderón, aún no hay ni siquiera licitaciones para la creación de fuentes alternativas de energía, ni un acuerdo para la realización de la nueva refinería de petróleo, que si bien nos va, estará lista para producir en 2015.
Salamanca y Tula son dos municipios con una refinería ya establecida, ambos con problemas ambientales resultado de las emisiones de carbono lanzadas tras sus operaciones. En Guanajuato, grupos ambientalistas reclamaron la postura del gobierno estatal al querer la nueva refinería en la entidad teniendo en cuenta los problemas de contaminación en el lugar; sin embargo, el gobernador Juan Manuel Oliva plasmó en su proyecto presentado que Salamanca es el único municipio monitoreado las 24 horas para evitar emisiones de carbono que dañen al medio ambiente, determinando así que Salamanca es el lugar con una refinería que no presenta problemas de contaminación.
Guanajuato es la sede alterna de la, tan anhelada, refinería; si en menos de un mes y medio el gobernador d Ángel Osorio Chong no consigue los terrenos requeridos, Salamanca, a pesar de sus problemas ambientales, será la sede del proyecto que es considerado la máxima obra del gobierno Calderonista.
Guanajuato, uno de los estados considerados más conservadores y cuna de la ultraderecha mexicana ganaría el proyecto a final de cuentas; después de todo un circo de declaraciones, enfrentamientos y luchas por las “causas democráticas” se iniciará, a medias, con el primer paso de la reforma energética tan debatida. ¿Cuándo terminaremos, o mejor aún, empezaremos a ver los beneficios de esta reforma?.
1 comentario:
me parece que la informacion esta bien pero ¿a mi en que me afecta esta reforma?
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