Reflexiones sobre Obama...por : Anabel Clemente Trejo.

El sueño Americano.

Tuve un sueño, no es que me sienta la reencarnación de Martín Luther King y repita esta frase tan utilizada últimamente en las elecciones pasadas de norteamerica. No, esta noche tuve un sueño tan trivial y desenfrenado, bueno, digo desenfrenado porque no sé si sea correcto escribir excitante; en fin, mi sueño empezaba en una playa bajo el rayo seductor del sol y frente a un… mmm, creo que no sería correcto escribir las escenas de mi sueño, mejor hablemos del señor Obama y del legendario Luther King.

Hace unos meses, bueno, ya bastantes meses, casi dos años, el nombre de Barack Obama comenzó a brillar por los escenarios del partido opositor al gobierno norteamericano, el Demócrata. Salió como una nueva esperanza para la población deprimida de Estados Unidos. Una guerra que sostenía el imperio yanqui en el lejano medio oriente, la vida consumista y obesa de sus habitantes y una, apenas previsible, crisis económica eran el entorno que cubría al nuevo brillo de la política gringa.

El negro estadounidense, originario de un Keniano y una norteamericana, decidió, (y su partido lo apoyó) a contender por la candidatura a la Presidencia de Estados Unidos. No estaba solo, también una mujer y siete hombres más (que no viene al caso mencionarlos pues la disputa por la candidatura fue basada entre el negro y la mujer), buscaban ser los candidatos del partido Demócrata por la Presidencia de aquel país.

La mujer, curiosamente la esposa de un expresidente Republicano, y el hombre moreno se enfrentaron en una batalla mediática para lograr su objetivo, ambos utilizaron un discurso de equidad y oportunidad para todos los oprimidos, negros, asiáticos, latinos, mujeres…en fin, sus propuestas eran similares, pero hubo uno que utilizó la popular frase de Martin Luther King “Tuve un sueño” y la frase ahora popular, por ser cantada por diversos personajes del medio artístico gringo, “Yes, we can”, y sumado a su condición racial logró la simpatía de la mayoría de esos sectores desprotegidos.

Después de una costosa competencia, debates televisivos y propaganda innovadora (antes no había escuchado a un mariachi cantando en inglés para Obama), ganó el hombre de piel morena que, como lo consigue la publicidad, logró seducir a mujeres y a hombres estadounidenses; también consiguió que los migrantes latinos lo apoyaran por ser los casi ciudadanos sin derechos en un país ególatra, y también logró que los habitantes negros, lo apoyaran incondicionalmente por seguir más que el sueño americano, el gran sueño de los seres humanos.

Para no hacer el cuento largo, el demócrata salió triunfador luego de una contienda con un republicano veterano que impulsaba la política de Bush, lo cual le resto puntos, y también el apoyo de su candidata a vicepresidenta que no daba una en los debates. Barack Obama resultó electo Presidente de los Estados Unidos el 4 de noviembre de 2008.

Martin Luther King era un ciudadano norteamericano negro en los tiempos en que estos no podían votar en algunos estados de un país que levantaba la bandera del capitalismo como eje central de la nueva vida pronto globalizada. Un país en el que eran divididos los ciudadanos blancos de los negros, a pesar de la firma que cien años atrás hiciera Abraham Lincoln en la que proclamaba la abolición de la esclavitud. Luther King fue un luchador de los derechos civiles de los negros en los años 60’s, aquella legendaria década de cambios sociales tanto en Estados Unidos como en el mundo.

El pastor Baptista de Atlanta logró conseguir el apoyo de su movimiento tanto de blancos como negros, así como de algunos políticos, que después asesinaron, como a Kenedy, pero su lucha se vio reflejada en el mítico discurso de 1963 "I have a dreem", el cual ha cobrado gran significancia a lo largo de la candidatura del actual presidente Obama; en fin, Martin Luther King era un pacifista inspirado en la doctrina de Mahatma Gandhi, la lucha sin violencia, motivo por el que se ganó la indiferencia de grupos muy radicales de la lucha de los negros en Estados Unidos.

Barack Hussein Obama II es el nuevo Presidente de Estados Unidos, lo es desde el 20 de enero, la toma de posesión, así como su campaña, le costó miles de dólares a los ciudadanos norteamericanos. Se enfrenta hoy en día, más que a una lucha racial y de equidad, a una de las peores crisis del capitalismo, el mercado tuvo que ser rescatado por el Estado y el modo productivo que tanto se defendió se ve colapsado, se prevé una estabilización de la economía en por lo menos dos años, el desempleo aumentó de manera inusual en la primer potencia, la guerra que se desató durante la administración de George Bush en medio oriente aún no tiene resolución, sólo hay un documento que indica que en 2011 las tropas estadounidenses comenzarán a retirarse, sin embargo, no existe la certeza de ello. La crisis económica es su principal preocupación, por ello, podría repetir lo que Martin Luther King indicó el verano de 1963 “pese a todas las dificultades y frustraciones del momento, yo todavía tengo un sueño”.

Obama integró en su discurso de toma de posesión que había llegado el momento que soñó Martin Luther King, un negro por fin es Presidente de Estados Unidos, pero a Obama le queda mucho más que el mero sueño americano de las minorías. Esperemos que al despertar, como yo, no se quede con ganas de seguir soñando.